El otoño es quizás una de las épocas del año más olvidadas para visitar las Islas Galápagos. El número de visitantes es bajo durante los meses de otoño. En octubre de 2017, 17.000 visitantes viajaron al Parque Nacional de Galápagos, frente a los 25.000 del mes más popular, julio, según las estadísticas del Parque Nacional. Sin embargo, no dejes que estas bajas cifras te disuadan. El otoño es, de hecho, una de las mejores épocas del año para realizar una excursión a las Islas Galápagos.
Aquí hay 7 grandes razones para visitar las Galápagos en otoño:
Si está planeando probar actividades como el snorkel durante sus vacaciones en las Galápagos, el otoño es definitivamente la mejor época del año para visitarlas. ¿Por qué? Porque la fuerte corriente de Humboldt fluye hacia las Galápagos debido a los vientos estacionales, provocando lo que se conoce como «afloramiento»; altera el entorno submarino, elevando los nutrientes a la superficie. Con tanta comida alrededor, hay un fuerte aumento de la actividad marina.
¿Cuánto cuesta viajar a las
Islas Galápagos?
Hay muchas especies de ballenas en las Galápagos, y una de las mejores formas de verlas es reservar una excursión de avistamiento de ballenas. Sin embargo, aunque estas excursiones suelen ser fantásticas, el avistamiento de una ballena sigue dependiendo en gran medida de la suerte. Puede aumentar sus posibilidades visitando el país en otoño, durante la temporada de migración de las ballenas azules y jorobadas. El canal de Bolívar, entre Fernandina e Isabela, es un punto de observación de ballenas de primer orden.
El otoño marca el final de la temporada de cría de leones marinos en las Galápagos. Y aunque los visitantes en esta época del año no puedan ver los nacimientos, es el mejor momento para ver a los pequeños cachorros tumbados en la costa. Puede que incluso los oigas mientras llaman a mamá. Y los leones marinos no son los únicos bebés que se pueden ver en las Galápagos durante el otoño. Los mullidos piqueros de patas azules también están por aquí, aunque todavía no tienen sus patas azules.
Para los fotógrafos entusiastas, la luz natural durante el otoño crea el telón de fondo perfecto para las fotos de la naturaleza. El tiempo en esta época del año es mayoritariamente seco y nublado, por lo que no hay que preocuparse por las fuertes lluvias o el sol abrasador. Y lo mejor de todo es que la estación de la garúa está empezando a desaparecer en esta época del año, por lo que todavía hay un poco de niebla en el aire que puede crear un aspecto muy dramático y dar a las fotos una gran apariencia.
Hay muchas actividades en las que puede participar en los numerosos lugares de visita de las Islas Galápagos. Sin embargo, algunas de estas actividades, como el senderismo, pueden resultar bastante incómodas durante la época de calor. Con temperaturas más agradables y menor humedad en otoño, es posible disfrutar de una mayor variedad de actividades, como el senderismo por el borde del volcán Sierra Negra, la caminata al volcán Chico o al mirador del lago Darwin.
Durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, las temperaturas en las Galápagos comienzan a calentarse después de un verano ligeramente más fresco. En esta época del año, los visitantes pueden esperar temperaturas agradables y no demasiado calurosas, con máximas de unos 25 grados centígrados y mínimas de 20 grados. El otoño es también una época muy seca en esta parte del mundo, y las temperaturas del agua en otoño rondan los 23 grados, por lo que son ideales para las actividades subacuáticas.
Como hemos mencionado antes, el otoño es una época del año muy tranquila en las Galápagos. De hecho, es la temporada más tranquila de todas, y se considera ampliamente como la «temporada baja» o «off season». Los meses de verano atraen a más viajeros debido a las vacaciones escolares, y los meses de invierno, debido a los altos calores. Esto significa que viajar durante el otoño puede ser una forma muy rentable de ver las Galápagos, con grandes ofertas de viaje que se pueden encontrar.
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